Se podrá visitar durante esta semana en horario de tarde en la Sala de Exposiciones Manolo Mherc
Con la inauguración el pasado viernes, 11 de noviembre, de la VII Exposición Colectiva de Pintura y Otras Expresiones Artísticas a cargo de las personas usuarias del Centro de Estancia Diurna de Ingenio (CED), se cerraron los actos realizados entre octubre y noviembre enmarcados dentro de la programación del Día Internacional de las Personas Mayores organizada por el Ayuntamiento de Ingenio.
La exposición, que estará abierta al público en la Sala Manolo Mherc durante esta semana en horario de tarde, se realiza en homenaje a nuestros artistas canarios, con sus paisajes coloridos y elementos propios de nuestra canariedad. La misma está compuesta por 45 óleos y cuatro composiciones realizadas con material reciclado con los cuales queda demostrado el gran trabajo que se realiza en el taller de pintura del CED, desarrollando el conocimiento artístico y creativo.
La concejala de Servicios Sociales, Elena Suárez, fue la encargada de inaugurar la muestra colectiva, la cual aprovechó la ocasión para felicitar a las personas participantes, así como agradecer el trabajo que desarrolla cada día el personal del centro y el apoyo de las familias. En cuanto al taller de pintura, explicó que nació hace 7 años, convirtiéndose «en un elemento terapéutico a través del cual las personas mayores se expresan y canalizan su día a día a través del arte». Asimismo explicó que el objetivo fundamental de esta exposición «es desarrollar la creatividad, la psicomotricidad, la concentración, la atención y, sobre todo, contribuimos a la felicidad de las personas con las que trabajamos, permitiendo que su capacidad artística fluya plenamente, ganando con ello autoestima y autoconfianza».
Finalmente, la monitora responsable del taller, Fátima Cruz Pérez, tras dar las gracias por el apoyo recibido, que les anima a superarse año tras año, habló sobre la técnica del óleo y sobre la elección de escoger este año como temática la obra de artistas canarios, aclarando que «no son copias simplemente. Cada uno ha puesto un pedacito de su ánimo, de su interés y su ilusión. Y sobre todo, la emoción que ellos sienten cuando pintan, es lo más reconfortante que puede una sentir. El mayor pago es ese, que sean felices y digan que la pintura les ha cambiado la vida».