El Centro de Salud de Ingenio vivía ayer una jornada triste tras el fallecimiento del enfermero y subdirector.
Durante la jornada de ayer lunes, 12 de julio, se conocía la triste noticia del fallecimiento del subdirector del Centro de Salud de Ingenio, Carlos Galván. Enfermero y formador de enfermeros, Carlos Galván trajo para el Centro nuevos retos y cambios que permitieron a los usuarios /as acceder a servicios tales como Espirometrías y Retinografías, entre otros. Durante más de quince años ejerció una labor abnegada y sin horario para la que, en palabras del compañero y médico de familia, Javier Santana, se mostraba “absolutamente entregado en cuerpo y alma”. Santana destacaba la consternación en la que se encontraba todo el personal del Centro de Salud de Ingenio. El médico afirmaba en la mañana de hoy que guardaba el mejor de los recuerdos para alguien que había conseguido llevar adelante el desarrollo del Centro con un “grupo tan grande, tan numeroso y tan diferente de profesionales”. Entregado en cuerpo y alma a su tarea, Carlos Galván supo ocupar la primera línea en la coordinación de la atención primaria en su área durante lo que el doctor Javier Santana calificó como el “período más duro de la sanidad” en referencia al COVID demostrando su gran capacidad de adaptación y de coordinación ante cualquier circunstancia.
Enfermero y formador de futuros enfermeros y enfermeras, Carlos Galván ejercía también como docente en la ULPGC, abriendo el Centro a las prácticas de los pre-graduados. Su marcha deja, en palabras de Javier Santana, un vacío irreparable, quien retrató el sentimiento compartido de todos sus compañeros incapaces de “imaginar el Centro de Salud de Ingenio sin Carlos ni a Carlos sin el Centro de Salud de Ingenio”.
Desde aquí nos unimos al dolor de sus compañeros/as. D.E.P. Carlos Galván.